9788446043683
Alicia anotada «150 aniversario / Edición de lujo»
Lewis Carroll
Editorial: Akal Fecha de publicación: 22/02/2017 Páginas: 416Formato: 25,5 x 19,5 cm.
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No es difícil decir por qué Alicia atrajo y sigue atrayendo a niños y mayores: cuando Alicia se cuela por la madriguera del conejo, entra en un mundo de fantasía donde puede encogerse como un insecto o crecer como un gigante, y ver cómo cobran vida las cartas de una baraja o las piezas de un ajedrez. Y es que, como ha dicho el poeta y crítico Andrew Lang: " ' Las Aventuras de Alicia en el País de las Maravillas ' y ' A través del espejo ' son libros que jamás cansan a un niño de mente activa. Ambos están llenos de imaginación y de humor. Nos sugieren mucho más de lo que nos dicen, y los que hemos crecido con ellos encontramos cada año nuevos mensajes " .
150 años desde que el Conejo Blanco despertó la curiosidad de Alicia cuando pasó ante ella corriendo a toda prisa. 150 años desde que la niña decidió aventurarse por una madriguera que parecía no tener fin. 150 años desde que personajes tan surrealistas y entrañables como el gato de Cheshire, la Reina de Corazones o el Sombrerero surgieran de la mente de Carroll para quedarse por siempre en el imaginario de la literatura universal.
Alicia descubrirá un mundo nuevo cuando pase a través de la madriguera del conejo.
Este fascinante poema nos sumerge de nuevo en el fantástico mundo de Lewis Carroll, vislumbrado en el poema «Jabberwocky» de Alicia a través del espejo. Narra «con humor infinito» el viaje imposible de una tripulación improbable para hallar a una criatura inconcebible. Fue publicado por primera vez en 1876, y ahora, por fin, presentamos en castellano la edición con las ingeniosas ilustraciones, casi oníricas, de la reconocida artista finlandesa Tove Jansson, conocida por ser la creadora de los Moomins, una divertida familia de troles escandinavos.
Alicia descubrirá un mundo nuevo cuando pase a través de la madriguera del conejo.
Con este libro los niños podrán disfrutar de la clásica historia de Alicia en el país de las maravillas, con todos sus personajes de dos formas diferentes: leyendo el divertido y famoso cuento, o coloreando las bonitas y divertidas ilustraciones usando su propia imaginación y creatividad.
Si te sientes como un niño ANÍMATE, incluye un póster gigante que quedará estupendo colgado en la pared una vez lo hayas pintado a tu gusto.
Lewis Carroll seis años después de su enorme éxito con Alicia decide publicar una segunda parte. En esta ocasión Alicia participa en una loca partida de ajedrez en la que intentará pasar de peón a reina. Algunos de los personajes nos recordarán a el Sombrerero Loco, La liebre de marzo..., pero esta es otra historia donde el espejo actua como un personaje más reflejando en él las cosas que van ocurriendo en el libro.
El trasunto metafórico que preside Al otro lado del espejo, una encarnizada partida de ajedrez, nos pone sobre la pista del sentido existencial e ideológico de las peripecias de Alicia; de un lado, nos señala que la elaboración más o menos exitosa de su proyecto vital es la propia de un ser finito, como finitos son los contornos espacio-temporales del tablero de ajedrez en el que libra su batalla; de otro lado (que evita muchas ingenuidades, tan caras a la educación de niños y niñas como Alicia), nos advierte de que sobre el fondo común de ciertas reglas compartidas se erige siempre la lucha por el poder, que no es solo el poder de ganar la partida y con ello ratificarlas, sino también el poder de establecerlas y ganar para sí el dominio del juego mismo.
“Cuando se alcanza ese punto en el que creemos existir exclusivamente tal como nos definen los demás, puede que sintamos algo muy similar a lo que siente un esclavo. Mis amos pueden ser visibles o invisibles, personales o impersonales. Es posible que logremos identificar a algún Humpty Dumpty con el poder suficiente para fijar o alterar el lenguaje a voluntad. Puede que parte del lenguaje institucionalizado no dependa de voluntad presente alguna, pero aun así permite a unos realizar actos de habla y a otros solo experimentar sus efectos. O quizás ocurra como en 1984, que estamos sometidos a una burocracia, invisible pero muy eficaz, de manipuladores que mantienen su poder reconduciéndola en diversas direcciones cuyo momento y ocasión nunca podemos determinar. Lo único que sé es que se ejercen actos de poder sobre mí y que yo no realizo ninguno.” J.G.A. Pocock